No es preciso, cuando se habla del contencioso que enfrenta a Mercadona y la CNT, hacerlo de forma violenta y, pese a todos los sucesos que salpicaron los 6 meses de huelga de nuestros compañeros del Centro Logístico de Barcelona, tampoco hacerlo como si el tener la razón, que la tenemos, sea suficiente para ganar la batalla entablada. Todos conocemos que los empresarios, y en este caso Juan Roig, poseen algo que nosotros no: el poder económico.
Si hemos comenzado este artículo con una obviedad, fue porque frecuentemente nos olvidamos de ella; y es algo que pone a la vista la injusta situación, aunque legal, que viven los trabajadores. Y cuando nos referimos a legal, no significa que la patronal cumpla siempre las leyes; sino que la mayoría de las veces aunque las incumpla, los tribunales acaban dándole la razón.
¿Cuál es, pues, el sistema para que los trabajadores consigamos que se reconozca nuestra razón, para que logremos que se tengan en cuenta y se cumplan nuestro derechos? Si es una obviedad el comienzo de este artículo, más obvia es aún la respuesta: consolidar nuestra fuerza en las empresas donde tenemos presencia. Así, a pesar de que las leyes no nos apoyan en la mayoría de las ocasiones, llegaremos a lograr dentro de lo posible nuestras reinvidicaciones. Y ya conseguida esta fuerza, solo se harán necesarios “métodos no muy ortodoxos” en el caso de que la cerrazón patronal impida unas negociaciones justas.
Como conclusión de este artículo, vamos a transcribir íntegra la comunicación enviada a la prensa hoy, 21 de setiembre:
“El pasado 20 de setiembre, los cenetistas de Mercadona de Pontevedra se integraron en la Sección Sindical de la CNT de Mercadona en Lugo, sección que, al ampliarse, pasa a ser la Sección Sindical de la CNT de Mercadona en Lugo y Pontevedra. El delegado sindical fue reelegido.
“En próximos días, esta sección sindical acordará la estrategia a seguir en el contencioso con Mercadona”.